Hasta hace bien poco, se tenía pensado que la mayor parte del éxito personal en el deporte se debía a la preparación física del deportista mas que a un adecuado equilibrio emocional. Por ello se le daba mucha más importancia a estos severos y rigurosos entrenamientos físicos que a tratar de instaurar y equilibrar determinadas competencias psicológicas que pudiesen ayudar a enfrentarse y superar los duros momentos que sufren los competidores en esta carrera de esfuerzo y dedicación, como constituye el mundo deportivo.
Se podría decir tal y como han concluido algunas investigaciones, que la mayor parte de este éxito se debe frecuentemente , a la preparación mental de los deportistas.
Desde hace unos años a esta parte se están realizando diferentes investigaciones en los que se estudian diferentes técnicas y procedimientos psicológicos que ayuden al deportista a la hora de poder conseguir de forma más óptima sus metas y objetivos. Los objetivos van destinados entre otros a superar sus marcas anteriores, a reducir ansiedad ante las presiones que puedan recibir en los entrenamientos, de los propios entrenadores, derivados de la rivalidad con otros competidores e incluso compañeros, de su propia autoexigencia, de las expectativas de familiares …
Uno de los beneficios de estos procedimientos psicológicos es ayudar a los deportistas a plantearse objetivos realistas y aprender a tolerar la frustración en el caso de que éstos no se consigan, además de analizar el por qué de estos fracasos o bloqueos en algunos casos. Es importante también, establecer una guía para seguir adelante desarrollando si es el caso, otros objetivos más adecuados, o a proporcionándoles otros caminos para llegar a esos fines.
Por otra parte, otra de las ventajas de aplicar estas técnicas consiste en aumentar la seguridad y la confianza en los deportistas. Asimismo, aumentar la motivación para llevar a cabo los duros entrenamientos a los que se somete a muchos de ellos, sobre todo a los deportistas de élite, es otra de las ganancias que se pueden obtener cuando se aplican estas herramientas de la psicología en el deporte.
Igualmente, se pueden utilizar para ayudarles a desarrollar un mejor control emocional ante las diferentes situaciones complejas y difíciles que se pueden vivir a nivel de competiciones o eventos que resulten traumáticos para algunos de ellos.
La psicología aplicada al deporte añade un sinfín de mejoras y de ganancias en muchas de las áreas en las que se trabaje, bien a nivel de deportistas de élite, en categorías de equipos o bien en el entrenamiento personal o individual en el que no se está sujeto a competición.
Se está observando desde hace ya unos años el fuerte incremento de la aplicación de estas técnicas en el mundo deportivo en multitud de especialidades y comprobando los privilegios y avances que se están consiguiendo a la hora de la superación personal.
En Bilbao, 5 de Febrero de 2024.
FDO: JOSUNE EGUIA FERNÁNDEZ